miércoles, 12 de agosto de 2009

Click

te desnudas, te revelas al mundo, enseñas tus más terribles miedos y luego llega el momento... lo inmortalizas o te devuelves al anonimato, a las frases no dichas, a necesidad inmutable pero ahora renovada.

Click...¡espera!...¿Click?

En una fracción de segundos tu posteo se une al mundo paralelo e infinito o simplemente lo ignoras y eres ignorada consecuentemente.
Sin ninguna pequeña posibilidad de ser escuchada más allá de tu alma.

Click


un gesto tan sencillo.
lleno de tanto poder y casi un enigma moderno.
universal dependiendo el acceso pero a cambio de un click eres quien desees ser, incluso múltiples personajes a la vez; robar una identidad o reinventarse en un pequeño click.

Eres parte de una gran masa y al mismo tiempo posees las exclusividad personal, retórica e impropia de quien quiera que seas.

En este mundo en el que vivimos el cambio ya no es requisito es implícito.
Te absorbe y quedas atrapada entre códigos a base de binomios.

Desde ahora eres un dígito, un click más a la distancia.


Se perdió el sentido arcaico de ordeñar, de ser un ser con la natura, la natura ha cambiado versatilmente en una nueva, constituida por bosques de unos y ceros.

Mientras tanto el disque mundo real sufre pero nosotros estamos adormedicos, sedados, vislumbrados por la gigante y sensual tecnología.

tecnología estamos a tu merced. click.
tecnología a tu merced estamos. click.


mientras tanto la libertad queda sutilmente latente entre lineas.
desde ahora es una decision mezquina.

hoy, me siento sumergida en un contexto yuxtapuesto tanto a nivel personal, social como profesional.

lo manual ante lo digital.
lo tecnológico ante lo rústico.
gaia ante matrix.
¿qué es esto? ¿cuál es el medio de acción?

click la gente muere de hambre.
click el agua exponencialmente es menos potable.
click residuos se acumulan y los recursos se sobre explotan.
click facebook.
click redes sociales en general.
click mi teléfono última tecnología
click mi computador
click consumismo
click click click click a nadie le importa

click... el horror
click... la vista gorda
click, bienvenido nuevo ser autómata...

2 comentarios:

  1. Hago click para apagar la maquinita. Miro entonces al mundo real en carne viva y quisiera que existiera un click para poder resetearlo.

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  2. jajajaj final perfecto. Es irónico y apropiado un botón para resetearlo jajaj buena idea.

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me echan el ojillo